La economía conductual es una disciplina que combina elementos de la economía tradicional con la psicología, la neurociencia y otras disciplinas para entender cómo las personas toman decisiones económicas y cómo estas decisiones afectan el mercado.
¿Qué es la economía conductual?
La economía conductual es una rama de la economía que se enfoca en cómo las decisiones económicas de las personas son influenciadas por factores psicológicos y cognitivos.
Los economistas conductuales estudian temas como la toma de decisiones en situaciones de incertidumbre, la formación de precios, el consumo, la inversión y la planificación financiera.
Características de la economía conductual
Algunas características de la economía conductual son:
- Enfoque interdisciplinario: La economía conductual combina elementos de la economía tradicional con la psicología, la neurociencia y otras disciplinas para entender cómo las personas toman decisiones económicas.
- Enfoque experimental: Los economistas conductuales utilizan experimentos para analizar cómo las personas toman decisiones económicas en situaciones controladas.
- Enfoque empírico: La economía conductual se basa en datos empíricos y estadísticas para analizar cómo las personas toman decisiones económicas en el mundo real.
- Enfoque en la toma de decisiones: La economía conductual se enfoca en cómo las decisiones económicas de las personas son influenciadas por factores psicológicos y cognitivos.
- Identificación de sesgos cognitivos: La economía conductual busca identificar los sesgos cognitivos y psicológicos que afectan la toma de decisiones económicas.
- Aplicabilidad en la política económica: La economía conductual ofrece una comprensión más profunda de cómo las personas toman decisiones económicas, lo que puede ayudar a los economistas y a los políticos a diseñar políticas económicas más efectivas.
Objetivos de la economía conductual
Los objetivos de la economía conductual son:
- Entender cómo las personas toman decisiones económicas: La economía conductual busca comprender cómo las decisiones económicas de las personas son influenciadas por factores psicológicos y cognitivos.
- Identificar sesgos cognitivos y psicológicos: La economía conductual busca identificar los sesgos cognitivos y psicológicos que afectan la toma de decisiones económicas, como el sesgo de confirmación o el efecto de anclaje.
- Proporcionar una base empírica para la toma de decisiones: La economía conductual se basa en datos empíricos y estadísticas para analizar cómo las personas toman decisiones económicas en el mundo real.
- Contribuir a la política económica: La economía conductual puede ayudar a los economistas y a los políticos a diseñar políticas económicas más efectivas al proporcionar una comprensión más profunda de cómo las personas toman decisiones económicas.
- Mejorar la educación financiera: La economía conductual puede ayudar a mejorar la educación financiera al proporcionar una comprensión más profunda de los sesgos cognitivos y psicológicos que afectan la toma de decisiones financieras.
- Proporcionar herramientas para la toma de decisiones individuales: La economía conductual también puede proporcionar herramientas y técnicas para ayudar a las personas a tomar decisiones financieras más informadas y racionales.
Ejemplos de economía conductual
Algunos ejemplos de temas que se abordan en la economía conductual incluyen:
- Efecto de anclaje: La tendencia a basar nuestras decisiones en un valor numérico o punto de referencia presentado previamente, en lugar de evaluar el valor de manera independiente.
- Sesgo de confirmación: La tendencia a buscar y dar peso a la información que confirma nuestras creencias preexistentes, en lugar de considerar información que las contradice.
- Efecto de disposición: La tendencia a valorar más los bienes que poseemos en comparación con aquellos que no poseemos.
- Ilusión de control: La creencia de tener más control sobre el resultado de un evento aleatorio de lo que en realidad se tiene.
- Efecto de perdida: La tendencia a evitar pérdidas con mayor intensidad que a buscar ganancias.
- Efecto de status quo: La tendencia a preferir no cambiar una situación existente en lugar de considerar nuevas opciones.
- Sesgo de planificación: la tendencia a subestimar el tiempo necesario para completar una tarea y sobreestimar nuestra capacidad para completar tareas en el futuro.