Los empleadores quieren candidatos que puedan evaluar una situación usando el pensamiento lógico y ofrecer la mejor solución. Se puede confiar en alguien con habilidades de pensamiento crítico para tomar decisiones de forma independiente, y no necesitará que se le dé un apretón de manos constante.

Las habilidades de pensamiento crítico se encuentran entre las más solicitadas en casi todas las industrias y lugares de trabajo. Usted puede demostrar su pensamiento crítico utilizando palabras clave relacionadas en su currículum y carta de presentación, y durante su entrevista.

¿Qué es el pensamiento crítico?

El pensamiento crítico se define como la capacidad de analizar la información objetivamente y hacer un juicio razonado. Implica la evaluación de fuentes, como datos, hechos, fenómenos observables y hallazgos de investigación.

El pensamiento crítico está muy relacionado con otras capacidades tales como la creatividad, la razonamiento o la intuición, permitiéndonos imaginar nuevas estrategias y formas de ver y adquirir las cosas.

En esencia, el pensamiento crítico requiere que se utilice la capacidad de razonar. Se trata de ser un aprendiz activo más que un receptor pasivo de información.

Características del pensamiento crítico

Una persona que utilice el pensamiento crítico podrá identificar, analizar y resolver los problemas sistemáticamente en lugar de hacerlo por intuición o instinto. Un buen pensador crítico ha de ser capaz de sacar conclusiones razonables a partir de un conjunto de información y discriminar entre detalles útiles y menos útiles para resolver problemas o tomar decisiones. Cuestionan rigurosamente las ideas y supuestos en lugar de aceptarlos al pie de la letra. Siempre tratarán de determinar si las ideas, argumentos y conclusiones representan el panorama completo y están abiertos a descubrir que no es así.

Los mejores pensadores críticos se distinguen de otras personas porque poseen algunas características que fortalecen el pensamiento crítico. Estas características incluyen:

  1. La curiosidad. Los verdaderos pensadores críticos están constantemente hambrientos de nuevas ideas y conocimientos. Sean curiosos acerca de todo y hagan preguntas que otras personas también tienen, pero no se pregunten a sí mismos.
  2. Humildad. Los buenos pensadores críticos reconocen que sus creencias e ideas pueden no ser siempre las mejores, y que no pueden saberlo todo. Hay un viejo dicho que dice: “El conocimiento viene a través de la humildad”. Por lo tanto, acepta que es imposible saberlo todo, porque hacerlo significará que probablemente pasarás más tiempo buscando respuestas.
  3. Investigación. A medida que profundizas en un tema, a menudo surge nueva información que te acerca a la respuesta que estás buscando.
  4. Escucha activa. No seas un oyente pasivo durante una conversación o discusión, en lugar de eso trata de participar activamente. Esto le obligará a hacer preguntas que le permitirán distinguir los hechos de las suposiciones.
  5. Objetividad. Los buenos pensadores críticos son capaces de ser objetivos. Se mantienen enfocados en su objetivo y no permiten que sus emociones personales (o las de otros) afecten su juicio.
  6. Creatividad. Sea creativo y entre en una sesión de lluvia de ideas, por ejemplo, sin prejuicios ni opiniones. Se sorprenderá de las ideas y soluciones que surjan! A menudo, no nos permitimos pensar libremente y buscamos principalmente ideas que refuercen nuestras creencias existentes.

Elementos del pensamiento crítico

Existen 5 elementos que conforman el pensamiento crítico, estos son:

  • Identificación de las premisas y conclusiones. Los pensadores críticos dividen los argumentos en afirmaciones básicas y extraen implicaciones lógicas.
  • Aclaración de los argumentos. Los pensadores críticos localizan la ambigüedad y la vaguedad en los argumentos y las proposiciones.
  • Establecimiento de hechos. Los pensadores críticos determinan si las premisas son razonables e identifican la información que se ha omitido o no se ha recogido. Determinan si las implicaciones son lógicas y buscan datos potencialmente contradictorios.
  • Evaluación de la lógica. Los pensadores críticos determinan si las premisas apoyan la conclusión. En los argumentos deductivos, las conclusiones deben ser verdaderas si las premisas son verdaderas. En los argumentos inductivos, las conclusiones son probables si las premisas son verdaderas.
  • Evaluación final. Los pensadores críticos sopesan las pruebas y los argumentos. Los datos de apoyo, la lógica y las pruebas aumentan el peso de un argumento. Las contradicciones y la falta de pruebas disminuyen el peso de un argumento. Los pensadores críticos no aceptan proposiciones si creen que hay más pruebas en su contra o si el argumento no es claro, omite información significativa o tiene premisas falsas o una lógica deficiente.

¿Por qué es importante el pensamiento crítico?

Los líderes empresariales toman importantes medidas todos los días, desde la contratación y el despido hasta la revisión de los informes de ganancias financieras, la participación en las reuniones de la junta directiva y el manejo de las crisis de relaciones públicas. Estas son las áreas precisas en las que el pensamiento crítico entra en juego, ya que los líderes empresariales utilizan esta habilidad para tomar decisiones difíciles, como dejar ir a un empleado o emitir un comunicado de prensa cuando un escándalo amenaza con empañar la reputación de una empresa.

Al aplicar el pensamiento crítico en los negocios, un líder debe usar la lógica para identificar, entender, analizar y resolver problemas. Esto requiere paciencia y práctica. La aplicación exitosa del pensamiento crítico a menudo resulta en procesos de trabajo más eficientes. Los siguientes tres ejemplos ayudan a responder por qué el pensamiento crítico es importante en los negocios:

  • Mejorar las estrategias de comunicación. Comunicarse con diferentes tipos de personas requiere definir las necesidades del público objetivo, lo que exige un pensamiento crítico. Por ejemplo, si una empresa está siendo comprada por un competidor, el director general debe considerar cómo afectará esto a todos, desde los empleados de bajo nivel hasta los inversores, y determinar qué mensajes transmitir a cada parte. Es esencial actuar con rapidez, ya que debe ser el primero en dar la noticia a los empleados para mantener su confianza.
  • Apoyar las operaciones sin problemas. Mantener las operaciones diarias en un entorno siempre cambiante requiere un pensamiento crítico constante. Por ejemplo, si se corta la electricidad en un restaurante y no hay un generador de emergencia, el gerente debe decidir no sólo qué hacer con los clientes y el personal, sino también si y cómo rescatar los alimentos refrigerados. Cuanto más rápido actúe el gerente, más probable es que saque lo mejor de una situación desafortunada.
  • Agilizar el desarrollo del producto. La función de desarrollo de un producto requiere múltiples decisiones para garantizar la eficacia, la comerciabilidad y la seguridad. Por ejemplo, si una empresa comercializa un nuevo utensilio de cocina, diseñarlo de cierta manera lo haría más atractivo, pero ese diseño también podría dificultar su uso. Cuanto antes se tome una decisión, antes podrá comenzar la producción.

Métodos para potenciar el pensamiento crítico

Hay habilidades que tienen la capacidad de mejorar en gran medida nuestra capacidad de tomar decisiones y argumentos objetivos y eficaces, y esas son las habilidades de pensamiento crítico. Sin estas habilidades, los argumentos pueden ser a menudo unilaterales. Las críticas pueden sentirse como un ataque personal a tu carácter en lugar de una oportunidad para abrir el diálogo y comunicarse de forma productiva.

Echemos un vistazo a cómo potenciar las habilidades de pensamiento crítico para que puedas entrar en cualquier situación con las herramientas necesarias para dejar de lado las emociones intensas y tomar decisiones perspicaces.

  • Se autocrítico. El primer paso, y el más importante, para desarrollar habilidades de pensamiento crítico es convertirse en un crítico de sus propios pensamientos y acciones. Sin autorreflexión, no puede haber crecimiento. Puedes analizar tus propios pensamientos preguntándote por qué crees algo. Al hacer esto, tienes que aclarar tus pensamientos evaluando esta información de forma objetiva y encontrando una lógica sólida a lo que crees, en lugar de una idea confusa. Cuando reflexionamos sobre nosotros mismos, podemos observar cómo respondemos a una situación, en nuestra mente y en voz alta. Otro aspecto de convertirse en autocrítico es reconocer tus puntos fuertes, tus debilidades, tus preferencias personales y tus prejuicios. Cuando conoces esta información, puedes entender por qué abordas ciertas situaciones desde una perspectiva específica, y entonces puedes dar un paso alrededor de ese punto de vista porque eres consciente de su presencia.
  • Escucha de forma activa. Pensar y escuchar es casi imposible de hacer al mismo tiempo. Para convertirte en un pensador crítico, tienes que ser capaz de escuchar las ideas, los argumentos y las críticas de los demás sin pensar en tu respuesta o reacción mientras están hablando. No puedes absorber adecuadamente la información que alguien está tratando de transmitirte si no te tomas el tiempo para escuchar de verdad. Escuchar nos permite sentir empatía. Escuchamos la historia de otra persona, sus luchas, sus ideas, sus éxitos y sus pasiones, y cómo ha llegado a ellos. Cuando escuchamos su perspectiva, podemos tomar esa información y analizarla. Cuando utilizamos las habilidades de escucha activa, podemos entender completamente lo que alguien está tratando de decirnos porque esa conversación continúa hasta que todas las partes pueden reiterar lo que el otro está tratando de decir.
  • Analiza la información. Analizar la información es primordial para el pensamiento crítico. Nadie piensa críticamente en todo momento. A veces nuestra alegría, enfado, tristeza u otras emociones son demasiado grandes, y otras veces nos cuesta centrarnos en la cuestión central. Para alcanzar el éxito, necesitamos analizar la información que tenemos ante nosotros, ya sea la que tenemos en nuestra mente o la que comparten los demás. Podemos desglosarla evaluando lo que se dice y asegurándonos de que entendemos claramente qué es lo que tiene que ocurrir. A continuación, podemos diseccionar y valorar todos los argumentos, incluidos los nuestros, y pensar en cómo las decisiones repercutirían en los demás, así como en el resultado final. Cuando podemos dar un paso atrás y analizar un argumento, nos permite abordarlo desde un punto de vista objetivo.
  • Comunica de forma “no violenta”. El pensamiento crítico no sirve de mucho si no se puede comunicar de forma no violenta y productiva. Al escuchar y analizar diferentes argumentos, primero hay que tener la capacidad de reconocer la lógica válida. A continuación, debes ser capaz de comunicarte con otras personas de forma productiva. La base de la comunicación no violenta es la compasión, la observación y la colaboración. Cuando abordamos cualquier escenario con compasión, ya estamos en una mentalidad pacífica, en lugar de una defensiva. Cuando observamos, podemos observar nuestros argumentos y los de los demás sin juzgar ni evaluar. Podemos separar nuestras emociones de una idea. No le gusta mi idea, así que no debo gustarle. Y la colaboración se produce de forma natural cuando todo el mundo entra en el proceso con una mente compasiva y abierta, centrada en resolver el objetivo que se persigue en lugar de proteger el ego de nadie.
  • Se más previsor. La capacidad de predecir el impacto futuro de una decisión es la previsión. La previsión es un componente crítico para el éxito en todos los aspectos de tu vida. Cuando te mudas a un lugar, planificas con antelación para ver cuáles son las perspectivas de trabajo y la seguridad de un barrio. Si se traslada un negocio, es prudente examinar el impacto de esa decisión. Cada decisión debe sopesarse cuidadosamente, teniendo en cuenta cómo afecta la elección a sus resultados, pero también a las personas que trabajan junto a usted para alcanzar el éxito. El pensamiento crítico requiere la capacidad de reflexionar sobre las propias creencias, así como sobre las ideas de otros, y luego ver las conexiones entre esas cosas. Requiere la capacidad de escuchar activamente a los demás, de evaluar, diseccionar y valorar los argumentos, y de separar las emociones intensas del tema en cuestión.

Ejemplos de pensamiento crítico

Las circunstancias que exigen este tipo de habilidades varían de una industria a otra. Algunos buenos ejemplos de pensamiento crítico son:

  • Una enfermera de triaje analiza los casos en cuestión y decide el orden en que los pacientes deben ser tratados.
  • Un fontanero evalúa los materiales que mejor se adaptan a un trabajo en particular.
  • Un abogado revisa las pruebas y diseña una estrategia para ganar un caso o para decidir si se llega a un acuerdo fuera de los tribunales.
  • Un gerente analiza los formularios de comentarios de los clientes y utiliza esta información para desarrollar una sesión de capacitación de servicio al cliente para los empleados.