Para el grueso de las personas, la idea de tener un mismo empleo toda su vida puede ser bastante desalentadora. En la mayoría de los casos saltamos entre trabajos y roles. De esta forma aprendemos y cambiamos constantemente nuestra visión de futuro y el dónde nos vemos a nosotros mismos.

Con una gran variedad de sectores y trayectorias profesionales, es comprensible que queramos probar suerte en diferentes puestos de trabajo. Sin embargo, con el fin de perseguir el ilusorio “trabajo de ensueño”, debemos poseer un conjunto de habilidades laborales que nos permitan la flexibilidad de encajar en diferentes roles y puestos de trabajo.

¿Qué son las habilidades laborales?

Las habilidades laborales se pueden definir como el conjunto de conocimientos, habilidades y actitudes que una persona necesita adquirir para llevar a cabo una determinada actividad laboral con éxito.

Dicho de otra manera, la competencia laboral es la capacidad de una persona para desempeñar una función productiva en el entorno laboral usando distintos recursos que aseguran buenos resultados.

Es un concepto que va de la mano con las capacidades profesionales que una persona tiene a lo largo de su vida laboral.

Tipos de habilidades laborales

Existen dos tipos de habilidades laborales: generales y específicas.

  • Competencias laborales generales. Aquellas habilidades que se caracterizan por no estar ligadas a una ocupación particular, sector económico, cargo o tipo de actividad productiva. Habilitan a las personas a ingresar al trabajo, mantenerse en él y aprender.
  • Competencias laborales específicas. Determinadas habilidades necesarias para el desempeño de las funciones propias del sector productivo. Poseerlas significa tener el dominio de conocimientos, habilidades y actitudes que conlleva el logro de resultados de calidad en el cumplimiento de una ocupación.

Importancia de las habilidades laborales

A menudo, tener un conjunto de habilidades laborales sólidas proporciona una base firme para que los empleadores construyan sobre ella. Nuestra gama de cualificaciones en habilidades generales son aplicables a una amplia variedad de funciones y abarcan varios sectores de la industria. Muchas de estas cualificaciones dan una introducción a un sector y ponen de relieve las habilidades necesarias para prosperar en determinados entornos.

Los empleadores a menudo buscan habilidades que van más allá de las calificaciones y la experiencia. Tu educación y experiencia pueden hacer que seas o no elegible para solicitar un empleo. Para tener éxito en la mayoría de los puestos de trabajo necesitarás algo más que tus habilidades duras. No tienes que preocuparte, estas habilidades extra o “tablas” las irás desarrollando con el tiempo.

Como regla general, los empleadores están dispuestos a enseñar a alguien las habilidades laborales específicas del trabajo requeridas, tales como cómo operar determinadas piezas de maquinaria, o utilizar determinados paquetes informáticos que son muy específicos para esa función o empresa. Sin embargo, por lo general quieren ver que usted ya tiene las otras habilidades blandas antes de contratar, porque son mucho más difíciles de enseñar.

Ejemplos de habilidades laborales

Inevitablemente, existe una amplia gama de habilidades que podrían ser útiles para los empleadores. Cada uno de nosotros también tiene su propia gama de habilidades y, por lo tanto, cada uno de nosotros puede hacer una contribución única a cualquier organización. Aquí tiene varios ejemplos de habilidades o capacidades laborales que buscan los empleadores actualmente:

Una mente abierta y la voluntad de adoptar nuevas ideas es probablemente uno de los atributos más útiles que puede aportar a cualquier empresa. Aprender a reconocer y utilizar nuestras habilidades adecuadamente es esencial para crecer laboralmente.